Creo que descubrí la manera de erradicar el flagelo de la depresión de las 6 de la tarde del domingo. Era más fácil de lo que uno puede llegar a imaginar. Sólo hace falta despertarse deprimido. O en todo caso, de no lograr esto, es válido también deprimirse instantáneamente, apenas abiertos los ojos. De esta […]